Rompiendo la maldición de la Ventana de colores

Windows Vista imposibleAsí como soy un feliz usuario de Software Libre, también ocupo cosas propietarias. No son cosas excluyentes. A veces leyendo varias publicaciones, libros, blogs, revistas, foros, queda la sensación de que la idea de libertad del software muchas veces se impone por sobre el desarrollo del software mismo o peor aún, sobre los intereses de los directamente afectados: los usuarios.

También es frecuente que digan que quienes defendemos el software libre generalmente lo hagamos ridiculizando al rival de siempre: Microsoft. Me incluyo (y me disculpo), la imagen es una ironía evidente. Pero lo hice a propósito en esta ocasión, pues quiero mostrar el lado contrario de la moneda que el amigo Christian Leal expuso en su blog. En general, prefiero evitar hacer esto pues solo tiene a arrastrar la discusión hacía lo que menos importa. Siempre es y será más valioso concentrar esfuerzos en superar las falencias propias que denigrar al rival. (aclarado esto, pueden olvidar la imagen, si quieren).

Christian dice que muchos de estos trasfondos ideológicos no le interesan en nada al público final. No estoy muy seguro, pero supongamos que así es. Eso no quita, que el publico final comprenda los procesos que hay desde la manufactura del silicio hasta y hacer clicks. Se que no es fácil explicar que los programas son «ideas escritas en código», pero cualquiera entiende que el yogurt es leche procesada. Es raro porque sin necesidad de saber que proceso exacto es el que convierte la leche en yogurt, los productores de lácteos perfectamente saben cuando el cliente encuentra un sabor más rico que el otro.

En cambio mucha gente no entiende claramente el orígen del software, he sido testigo de gente que cree que el software los hacen los propios computadores y/o que simplemente aparece cada cierto tiempo.

En el caso del software o «ideas escritas en código» proviene de las ideas de los ingenieros, economistas, sociólogos, diseñadores, … profesionales en general, y el mismo público. El público es al fin y al cabo el actor principal en el desarrollo, por eso cuando el usuario comprende que puede intervenir en estas «ideas», es cuando los beneficios de los cambios llegan más rápido. Ocurre lo mismo tanto en el lado de software libre como en el lado del software propietario.

Es por eso, que la libertad en el software es más que un plus o un valor agregado. Es una poderosa llave para entrar al proceso del desarrollo.

¿Que al usuario no el importa meterse a esas cosas? Claro que sí. A todos los usuarios le interesa tener las mayores prestaciones posibles a un mínimo costo, como con cualquier producto (microeconomía básica). Y cuando escogemos A por sobre B es una de las formas en que decimos que A cumple más que B por menor costo. Pero esta suposición básica implica que el cliente conoce completamente A y B. Para mí, parte importante de los problemas está acá.

Lo que concuerdo plenamente de la discusión en El Francotirador es que a veces los usuarios acaban frustrados, más que nada por el ejercito de desinformantes que atacan cuando se busca ayuda. A veces sin quedarles otra que dejar tirado al pingüino y volver a donde estaban.
Cuando yo me topo con problemas, tanto en Windows como en Linux, me irritó igual como cualquiera lo haría. Es frustrante cuando cosas simples se tornan imposibles. Por eso es que en base a mis experiencias, termino decantando más por B que por A. En Linux también he tenido pésimas experiencias. Y con pésimas, me refiero a perdidas catastróficas. En esta ocasión, como un usuario más me enfrente a la Ventana de Colores, quedando más frustrado que con cualquier otra cosa.

(Antes de leer el resto, aconsejo un café y/o algo para entretener las muelas, se viene largo)

Visual Studio Express 2008

Como me gusta la programación, me decidí a probar Visual Studio 2008 Expres, que puede descargarse gratuitamente tanto cada programa por separado como el .iso de un DVD. Preferí bajar el .iso.

Instalando Visual Studio me salió un error. Uno de los pre-requisitos era el .Net Framework 3.5, que de hecho venía en el mismo instalador, pero falló. Decidí instalar el Framework por separado, así que me dirigí a la web de microsoft, busque en las descargas, baje el instalador y le hice los clicks correspondientes. Volvió a arrojar un error. Esta vez me salió un mensaje con un enlace, pero no se podía clickear ni copiar (quien habrá sido el genio?).

Escribí la url a mano (que no era corta ni fácil de recordar), llegando a una página de ayuda de microsoft. ¿Se han fijado que nunca la situación que le ocurre a uno está descrita en la ayuda? Esta vez no fue la excepción.

Intenté en vano mirar el Visor de Eventos. Encontré el mensaje de error, pero era absolutamente incomprensible, no por el idioma (como suelen caerse muchos al leer mensajes del sistema), sino que apuntaba a no se que componente que no se que cosa hacía, pero debo contactarme con el administrador del sistema (que SOY YO MISMO!!!).

Decidí buscar ayuda, por lo cual copie el código del error en Google, y llegue al blog de los desarrollares del .Net Framework, quienes anunciaban con bombos y platillos su última versión.

Curiosamente, encontré a otras personas en la misma situación consultando en el blog, y los desarrolladores contestaban que lo «van a estudiar», que por mientras intentásemos instalar el framework por separado y luego visual studio (duh!).

Me sentí pinponeado*.

A la basura el DVD.

El Windows Vista Service Pack 1

Hace poco rato salió el Service Pack para Windows Vista. También lo baje, suponiendo que podría subir un poco el rendimiento y mejorar en algo (se supone que para eso son las actualizaciones).

Fue más simple, lo baje, le hice sus clicks, llego hasta cierto punto y me mando un error. Nuevamente busque las sugerencias de ayuda del mismo error y llegue a una página que describía lo importante que es enviar a Microsoft información sobre las instalaciones, ni rastros de soluciones, ni disculpas por el error.

Actualizaciones automáticas

Pero ahora me ocurrió algo que ya no logro entender. ¡Había una actualización automática que después de instalada volvía a aparecer! Entonces decidí buscar que ocurría, y llegue a otra página de Microsoft donde decía que la actualización problemática había sido retirada. ¿Por qué sigue apareciendo entonces?

Problemas con terceros, suma y sigue

Hace más tiempo, tuve problemas raros con ciertos programas de terceros, que según los productores, eran compatibles con Windows Vista. En particular tuve problemas con Safari y Flashget. El primero se caía al abrirlo y el otro al ejecutar una descarga (con el navegador que fuera).

Intenté repararlos mirando el Visor de Eventos. El de Safari decía que había un problema con Webkit.dll, el otro no lo encontré en el visor. Decidí desinstalar Safari, todo el software Apple, borrando además todos los archivos asociados a Apple en el perfil de mi usuario (cosa que no cualquiera sabe hacer). Nada, seguía igual.

En esa ocasión no tenía tiempo de hacer una instalación limpia, así que tuve que recurrir a instalar un Máquina Virtual con Windows Xp (con el consumo extra de recursos asociado a ello).

Ahora decidí probar una instalación 100% limpia de Windows Vista, incluso sin los drivers (en caso de que fueran incompatibles). Me ocurrió lo mismo con el framework, el service pack y las actualizaciones automáticas. Safari y FlashGet funcionan correctamente. Eso demuestra que no eran esos programas en particular los que tenían fallas (ocupé los mismos instaladores).

Otras asuntos más cotidianos

Mi mamá, a pesar de que se lo dije en TODOS los tonos, se compró un computador «barato» en una multitienda. Venía con Windows Vista Starter. Su idea era tener un computador básico para escribir sus documentos, y de vez en cuanto navegar en Internet.

Hay que aclarar que mi mamá es una persona que podría representar a un usuario novato que aún no se ubica completamente en el escritorio, de hecho aun confunde los controles de las ventanas con la barra de tareas, el escritorio y otras ventanas. Es necesario mencionar, también que sacó un curso de Ofimática (no mentira, sacó un curso de Word 2000 o XP). Lo aprobó con un 7.0. Más que eso, su experiencia de usuaria de Windows XP es mínima. En Vista derechamente se perdió. Podríamos decir entonces que califica en el caso de «no me interesa saber como funciona, solo quiero que lo haga».

Como buen hijo, le he enseñado como moverse en el escritorio, para que pueda escribir sus documentos. Mi hermano decidió que lo mejor era que usara Office 2007, por ser bonito e «intuitivo». OK, me dió mismo.

Mientras escribía, a veces necesitaba que si el texto dentro de una tabla se hacia otra hoja, que entonces se repitiera el encabezado de la tabla en la siguiente. Como no sabía hacerlo, decidí buscar en la ayuda. Lo encontré, decía exactamente lo que quería hacer, así que seguí las instrucciones, haga click allá, escoja acá, presione aquello… ¡Pero «AQUELLO» no estaba!. ¿Intuitivo? Claro que sí, tuve que usar la intuición y la suerte para encontrar la opción porque no estaba donde la ayuda decía. Mi mamá quizás todavía estaría buscándola o probablemente habría terminado escribiendo un pésimo documento.

Finalmente logró escribir sus trabajos, entonces llegamos a una acción que no puede ser más cotidiana: Imprimir. Mandó a imprimir su trabajo (instalamos la impresora en red con otro PC). Extrañamente salió cortado el pie de la hoja. Después de mucho configurar tanto la hoja en word como en a impresora, y guardando las opciones en forma predeterminada, logré mandar a imprimir. Le dije que la próxima vez que quisiera imprimir una hoja similar, que ocupara el documento anterior, lo guardara como uno nuevo, borrara el contenido y finalmente escribiera, al mandar a imprimir ya estarían las opciones bien puestas.

Entonces siguió trabajando sola. Cuando volví tenía otro problema, me mostró las hojas impresas, y salieron «como en zigzag». ¿Estará fallando la impresora? No, no era la impresora, probe con páginas de purba, textos, dibujos, todo ok. Tuvimos que convertir el documento a PDF, copiarlo en un pendrive y mandarlo a imprimir en el otro PC, así salió bueno. Al menos acá a mi mamá se le ocurrió probar con otro PC (¿y si no tuviéramos otro?).

¿Que ocurre?

Al igual que Francotirador, me enfrente a un desarrollador irresponsable, pero en mi caso ni siendo un genio tengo como arreglar el problema, pues no hay libertad para examinarlo. Tendré que esperar a que ellos descubran las falla (si tienen voluntad de hacerlo). Mi libertad me permitió solo llegar hasta un tímido reclamo.

Tuve la experiencia cercana de un usuario representativo (mi madre), sin Educación Digital. Yo no soy pedagogo tampoco (ella sí lo es). Siento que a veces soy como el dueño del auto enseñándole a manejar a un hijo (¡Mira el camino!, ¡frena!, ¡pone atención!, ¡dobla para allá!, …), supongo que se entiende. Estando al lado de mi mamá entendí varias cosas, entre ellas que no sabe buscar ayuda, no sabe como pedirla, no sabe donde pedirla o buscarla y le hace caso a cualquier cosa que se le pone en pantalla. Algunos se aprovechan esto en su propio beneficio, dando poro lugar a la confianza.

También tengo la experiencia de años de muchos usuarios desesperados preguntando en Foros y Blogs. Entre ellos hay de todo, gente amable, considerada, voluntaria, trolls, engreída, empática, impaciente, humildes, petulantes, fanboys, irresponsables, … Aplicando siempre la misma fórmula: «ser amable, preguntar datos de los problemas en forma precisa, responder solo con argumentos o mi experiencia» lamentablemente no siempre funciona, a veces algunos terminan contentos, otros frustrados. A veces las discusiones por problemas técnicos terminan en asuntos valóricos o personales. Pero es muy gratificante cuanto te dicen «Oh! excelente, ahora puedo hacer lo que quería, muchas gracias», aunque sean los menos.

Otra grandiosa experiencia que tuve para interactuar con público (informáticamente hablando) fue en Flisol 2007 Santiago. Fue maravilloso haber podido dar a conocer que Linux es una estupenda plataforma para juegos. Supuse que su mayoría, los asistentes al evento eran alumnos del mismo Departamento de Informática. Cuando realmente me sorprendí, fue al acabar mi exposición. Me vi en una sala abarrotada de público, sentados hasta en el pasillo. Luego, conversando con algunos, encontré alumnos de colegio y varias otras personas que no tenían nada que ver con mi carrera. El interés es real, y es creciente.

Entonces, no puedo decir que «la gente» o «los usuarios», ni de Windows, ni Linux, ni de OSX sean flojos, cómodos o que muchos problemas son en definitiva su culpa. Yo diría más bien que no tienen siempre tienen una educación completa, que les permita decidir. Aprenden generalmente por tener alguien cercano enseñándoles: pariente, amigo o profesor. Tampoco puedo decir que a Windows le falta mucho para ser fácil, ni tampoco puedo decir que Linux no se ha medido con la misma vara respecto a sus pares. Sin duda en el mundo libre, la curva de evolución ha sido empinadísima, tanto que me sorprendo día a día como todas las peripecias que tenía que hacer antaño para hacer mis tareas ahora tiene pasos sumamente simples. No hace falta montar un pendrive en consola o desmontar un cd para sacarlo, ni comandos extraños para realizar tareas cotidianas.
Lo malo es que si a un usuario novato no «se le ocurre» que para instalar un programa debe bajar un instalador, hacerle clicks y decidir varias cosas, tampoco veo como podría «ocurrírsele» buscar un paquete en un manejador de repositorios. Si podría decir que intentar dejar A para adentrarse en B puede ser difícil, sobre todo cuando la situación es que A nos falla pero a B lo desconocemos.

Mi mamá calificó con un 7.0 en su curso de Word, y en la práctica no le sirvió para nada. Hace muchísimo tiempo, trabajaba muy seguido en un programa hecho a medida que funcionaba en MS-DOS, ¡¡¡Sí, esa feísima consola endemoniada!!!, y trabajaba en ese programa sin ningún problema, ya que ese programa fue desarrollado según sus requerimientos, y era el mismo desarrollador el que le enseñó a trabajar con él.

Lamentablemente no todos los usuarios tienen la suerte de tener al ingeniero al lado, o a un amigo, pariente o profesor.

Como dije en allá en el blog de Francotirador (y agradezco que me lo haya destacado :D), «Siento que estamos como en una época donde llegaron muchos autos a Chile y no habían normas de tránsito, pero ahora con tecnologías de información«. De hecho, en este minuto, podrían ir a ver en cuantos colegios se pasan normas del tránsito (entiendo que es obligatorio).

Bueno, no sigo más, tengo que reiniciar, permiso…

* Pimponeado: Lanzado de un lado a otro en forma cíclica.

6 comentarios sobre “Rompiendo la maldición de la Ventana de colores”

  1. Interesante artículo estimado Gon, y debo decir que coincido contigo en varios puntos. Mira, en estos momentos no tengo tiempo de comentar todo lo que quisiera, de hecho es tanto que probablemente lo más adecuado sería hacerlo con una trackback a tí y a FT.

    Pero te cuento que hago yo para explicar el Software Libre, y que he tenido bastante éxito:

    «Mira, imagina que el programa es un queque, que para preparase requiere de una receta que es lo que se conoce como código. Bueno, Windows por ejemplo es como que te dieran un queque, pero del cual tu no tienes idea con lo que lo prepararon. Quizá te gusta más dulce, o con más o menos polvos royal, pero no. A ti simplemente te lo entregan preparado. Quizá hasta viene con cosas dañinas para tu salud.»

    Listo, con eso, el usuario ya entiende perfectamente lo que significa y deduce el resto de ventajas solito. Ahora la gente que se relaciona conmigo entiende perfectamente el concepto (aunque tema dejar su software habitual).

    «ahhhh, o sea puedo adaptarlo a mis necesidades»

    «aahhhh, por eso hay «tantos» (haciendo alusión a la cantidad de distros»

    Y así, en el fondo la mayoría (debo decir con orgullo que desde hace 6 meses soy 100% Windows Free) come un queque que no sabe de que está hecho.

    También lo explico con casas y los planos… y así, hay innumerables formas de hacerlo sin caer en tecnicismos complejos.

    Y luego de toda la explicación le dices.. bueno, prefieres comer algo que sabes como está preparado o uno que no tienes idea… elige.

  2. Mmm…

    Para serte franco, Gon, esperaba un poco más de este artículo que la simple lógica del empate. Y en especial porque yo no defiendo a Windows, defiendo a los usuarios.

    ¡Saludos!
    FT.

  3. Muy buena contra parte, por lo general los windowseros defienden lo indefendible y se hacen los tontos frente a los problemas que mencionaste, problemas casi ridiculos pero del diario vivir de todo windowsero…. y despues dicen que windwos les funciona perfecto, algo que los que sabemos de SO, sabemos no es cierto.

    Por cierto, tu blog se fue a favoritos en el mio.

    saludos !!

  4. Un poco a destiempo, pero no pude resistir la tentación de agregar un comentario a este artículo y al de Christian Leal. De antemano mis disculpas a Christian por poner aquí referencias a su artículo, pero es que en su blog ya había demasiados comentarios :).
    Relativamente, soy un recién llegado a Linux. En Windows recorrí un largo camino desde la versión 3.0 hasta XP. Hará cosa de un año, harto ya de los constantes problemas que me daba Windows en mi quehacer cotidiano, decidí probar Ubuntu, y aquí me quedé. Es a partir de esta experiencia que quiero hacer unas cuantas reflexiones.

    1. ¿Windows es más fácil de utilizar que Linux para un usuario promedio?
    A mi me parece que esto no es cierto, y que esta visión parte de una equivocada tipificación del «usuario promedio». En general, quienes critican a Linux son usuarios con un nivel de conocimientos muy superior a la media. El usuario promedio ni siquiera sabe lo que es Linux.
    En estos días estoy preparando un pequeño curso-taller de manejo básico de las herramientas informáticas dirigido a adultos con escasos o nulos conocimientos informáticos. A partir de charlas que he sostenido con mis potenciales alumnas y alumnos, estas son las tareas que desean realizar en una computadora, por orden de importancia:
    a. Buscar información y comunicarse por medio de internet.
    b. Gestionar fotos.
    c. Reproducir música y video.
    d. Elaborar y gestionar documentos de texto.
    Desde mi punto de vista, las personas a quienes entrevisté son una muestra muy adecuada del «usuario promedio», que jamás ha instalado ni instalará Windows u otro sistema operativo; que pedirá ayuda cada vez que un periférico no sea reconocido por su máquina y que no tiene idea de que puede «hacer un DVD con las fotos de mis vacaciones». La «amigabilidad» del sistema operativo que utilice dependerá de dos cosas:
    Lo ardua que sea la curva de aprendizaje para realizar las tareas que necesita, y
    Lo eficiente que sea el software, una vez que se ha aprendido a utilizarlo.
    Estamos tan acostumbrados a los métodos y metáforas de Windows que a menudo olvidamos que su aprendizaje supone una penosa curva de aprendizaje; basta con mirar a una persona novata batallando con un mouse. En ese sentido, tan fácil (o tan difícil) es aprender a realizar las tareas mencionadas en Linux como en Windows, cuando el SO está bien configurado.
    En cuanto a la eficiencia, quien ha probado Linux puede afirmar que Windows no es un buen competidor, y menos cuando se trata de la máquina de un usuario promedio. La mayoría de las consultas (gratuitas) que me hacen mis amigos son debidas a virus, caídas irrecuperables del sistema, lentitud debida a problemas en el registro, etc.

    2. La prepotencia de los falsos hackers.
    Antes de adoptar Linux definitivamente como mi SO primario, había hecho dos intentos fallidos, en los que tuve que claudicar debido a lo complicado que era instalar mis controladores. Desde entonces a hace un año que instalé Ubuntu, las cosas han cambiado radicalmente. De hecho, lo que más me impresionó al probar el live cd fue el montaje automático de pendrives y… el synaptic. Curiosamente, cada vez que busco ayuda en internet, la mayoría de los «how-tos» manejan métodos de instalación por medio de la consola. Es algo que no termino de entender: existiendo una metodología gráfica tan poderosa y sencilla como el synaptic o el adept, ¿por qué ese empeño en complicar las cosas? Ahora que tengo experiencia en linux, sé que el uso de la consola simplifica muchas tareas. Por otra parte, durante muchos años utilicé msdos, así que no me resultó complicado. Sin embargo, para un usuario «intermedio», esto resulta muy intimidante.
    En ese sentido, le asiste toda la razón a FT. Pero esa actitud prepotente no es privativa de los linuxeros. En cuanto uno se mete a foros de temáticas windows más o menos especializadas, indefectiblemente uno se encuentra a algún mamón que trata de mantener inexpugnable su «coto de conocimiento». Cuestión de naturaleza humana, tal vez. Pero también me he encontrado en ambos «mundos» a un buen número de personas generosas y desinteresadas que están dispuestas a aportar sin otra recompensa que la satisfacción personal de saber que ayudaste a otra persona y alimentar tu propia autoestima.
    Pero de ahí a que esta nefasta actitud sea la principal responsable de la poca difusión de Linux, se me hace una imperdonable exageración y una banalización del verdadero meollo del asunto, que comento a continuación.

    3. ¿La libertad es un plus o una necesidad?
    FT comenta (cito):
    «Lo diré sin anestesia: muchachos, al 98% de la masa de usuarios le importa un carajo la comunidad, la libertad, la filosofía GNU, la propiedad intelectual o cualquier otro de esos principios que tanto destacan cuando intentan promover Linux.
    Sencillamente no les interesa. Otra vez, sólo quieren hacer sus labores, comunicarse o divertirse. Ir del punto A al punto B.»
    Esto es completamente cierto. Pero el que sea cierto no implica que sea correcto. Y como en muchos casos, perdemos la perspectiva de la real trascendencia que tiene para nuestra vida cotidiana el asumir esta aparentemente estéril disputa ideológica.
    De ese referido 98%, ¿cuántos han pagado una licencia del Windows que tienen instalado en su máquina? Supongo que una minoría, al menos en nuestra América, y por eso asumen que el Windows que utilizan es tan gratuito como Linux. Sin embargo, eso es totalmente falso.
    Lo siguiente es una conjetura personal: la piratería de los productos Microsoft en las máquinas personales y familiares es alentada por el mismo MS. De esta manera, aseguran un casi monopolio en el mercado de los OS, garantizando la «fidelidad» de un rico filón económico: las grandes empresas y las dependencias gubernamentales.
    Imaginemos por un momento que MS y nuestros gobiernos endurecieran la lucha contra la piratería, de tal manera que fuera prácticamente imposible tener copias ilegales de Windows. ¿Que haría la gran masa de usuarios? ¿Tirar a la basura sus PC’s?
    La cantidad de dinero que los gobiernos gastan en licencias de software es enorme. Dinero que perfectamente se podría utilizar para generar soluciones informáticas más adecuadas para las necesidades de nuestros países, libres y gratuitas.
    Se ha hablado mucho del costo que tendría la curva de aprendizaje en el caso de una migración. ¿Cuál costo? ¿Cuál curva? La realidad es que las aplicaciones más utilizadas son las ofimáticas. Open Office suple perfectamente a MSOffice, y en algunas tareas específicas, con ventaja. En cuanto a su operación, es tan parecida que en muchas ocasiones los usuarios ni cuenta se dan que no están usando Word.
    La realidad es que nos han acostumbrado a ir del punto A al punto B de manera irreflexiva, con un falso pragmatismo que en ocasiones se traduce en cinismo. Las ventajas del modelo abierto son evidentes; tan sólo véase el desarrollo exponencial que ha tenido la plataforma en los últimos tres años. A medida que haya más usuarios, este desarrollo se hará cada vez más rápido y más cercano a sus necesidades. Y si no cerramos los ojos ante lo pernicioso que resulta el monopolio MS para nuestros países, podremos alentar a nuestros gobiernos para que abandonen su miopía o complicidad y nos brinden una esperanza de independencia tecnológica.
    4. Lo que echo de menos de Windows.
    Por supuesto, Linux no es perfecto. Mi transición ha sido todo, menos tersa. Existen diversas áreas muy débiles, a las que no se ha puesto toda la atención requerida o bien no son prioritarias para los desarrolladores. Entre las principales (para mi):
    Flash (creador). Aún cuando la versión que utilizo (8.0) corre decentemente bajo Wine, lo hace con un buen montón de irritantes fallas. Espero que Adobe se anime pronto a sacar una versión decente para Linux.
    Flash player decente. Al menos en mi máquina, el plugin corre muy lento. Mal trabajo de Adobe, supongo.
    IrfanView. Hasta ahora no he encontrado un buen sustituto, con la facilidad de uso y versatilidad de este visor gratuito de imágenes.
    Un editor decente de video. Cinelerra es un galimatías; Kdenlive está muy verde, los otros… son una vacilada.
    Xara Xtreme completo. Desde hace muchos años cambié el Corel y el Illustrator por Xara. Desgraciadamente, la versión Linux está estancada, y tristemente parece que ahí se quedará. ¡Me daría por bien servido si tan sólo funcionaran los filtros de importación y exportación a formatos vectoriales!
    Y nada más.
    P.D. El escrito quedó mucho más largo de lo planeado. Me sirve para clarificar muchos conceptos, y espero que a alguno de los lectores le sea útil también.

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